En un juicio, la persona que haya de tomar declaración ante el jurado, testificar, lo hacen sobre la Biblia. Antiguamente no era así, y de ahí la procendencia de la palabra testificar.
Esta es una de las diversas teorías, otra afirma que el origen de esta palabra proviene de testigo y está a su vez viene del antiguo ibero “testiguar”, el cual viene del latín testificare. “Testificare” esta compuesto de testis (testigo) y facere (hacer). Se desconoce la causa por la cual el ibero no tomo la palabra testigo.
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